jueves, 4 de septiembre de 2008

La Petit de Nestlé tiene razón+Sublimación

De tanta paciencia que tenemos,nos vamos a elevar,vamos a levitar suavemente como Buda
y como dice Cintia,nos salieron huevos de colores, unos lindos, ¡divinos! huevos de Pascua.
Sí, es dramático, sórdido, bizarro, a veces te da ganas de llorar...
El speech que usamos lo modificamos porque las palabras ejercen violencia simbólica,
si utilizás una terminología compleja, la incomprensión va a ser unilateral y la llamada
telefónica no va a llegar a buen puerto. El destino,seguramente, va a ser la puteada,
vó me díte el turno para equis fecha a equis hora, eh, vó no me queré dá el turno y
así se forma un lamentable círculo vicioso que conduce a infinitas cefaleas, golpes en la mesa y
recargas de las operadoras...¿cómo es esto? Bueno, ahí va la explicación: cuando la paciencia
del telemarketer llega a un límite alerta rojo, éste tiende a extender los brazos hacia arriba
con el propósito de tocar los laterales superiores del box, es como si un campo magnético nos
diera fuerzas, como si la paciencia que le queda a la operadora de al lado se trasmitiera por ósmosis a la que está a punto de desfallecer por repetir siempre lo mismo y ser presa del sonido de grillos intermitente....
Saludillos
Cecilia

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